La oración completa del Ave María, también conocida como la Salutación Angélica, es la siguiente:
Dios te salve, María,
llena eres de gracia,
el Señor es contigo,
bendita tú eres entre todas las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
La oración del Ave María es una de las oraciones marianas más conocidas y recitadas en la tradición católica.
La primera parte de la oración proviene del saludo del Arcángel Gabriel a la Virgen María en la Anunciación, mientras que la segunda parte es una petición a María como intercesora y protectora de los cristianos.
La oración se utiliza comúnmente como una forma de veneración y devoción a la Virgen María y como una ayuda para la meditación y la contemplación espiritual.
