Los domingos se meditan los misterios gloriosos del Rosario, que se centran en los acontecimientos gloriosos de la vida de Jesús y de María.
Los misterios gloriosos son cinco:
- La Resurrección: Jesús resucita de entre los muertos al tercer día.
- La Ascensión: Jesús asciende al cielo en presencia de sus discípulos.
- La Venida del Espíritu Santo: El Espíritu Santo desciende sobre los apóstoles en Pentecostés.
- La Asunción de María: María es llevada al cielo en cuerpo y alma.
- La Coronación de María como Reina del Cielo: María es coronada como Reina de todo el universo.
Cómo se reza el Rosario en Domingo
- Hacer la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
- Rezar el Credo: Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra…
- Rezar un Padrenuestro: Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre…
- Rezar tres Avemarías: Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo…
- Rezar un Gloria: Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo…
- Anunciar el primer misterio y meditar en él: En este caso, el primer misterio glorioso es la Resurrección de Jesús. Mientras se medita en el misterio, se recitan un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria.
- Anunciar el segundo, tercer, cuarto y quinto misterio y meditar en ellos: Se siguen los mismos pasos que en el punto anterior.
- Rezar la Salve: Dios te salve, Reina y Madre de misericordia…
- Hacer la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
