El Salmo 53 en la versión Reina-Valera es el siguiente:
1 Dice el necio en su corazón: No hay Dios.
Corrompidos están, hacen obras abominables;
No hay quien haga bien.
2 Dios miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres,
Para ver si había algún entendido,
Que buscara a Dios.
3 Todos se desviaron, a una se han corrompido;
No hay quien haga lo bueno, no hay ni aun uno.
4 ¿No tienen conocimiento todos los que hacen iniquidad,
Que devoran a mi pueblo como si comiesen pan,
Y a Dios no invocan?
5 Allí se sobresaltaron de pavor, donde no había pavor;
Porque Dios esparció los huesos del que acampaba contra ti;
Los avergonzaste, porque Dios los desechó.
6 ¡Oh, si saliera de Sion la salvación de Israel!
Cuando Dios hiciere volver a los cautivos de su pueblo,
Se gozará Jacob, y se alegrará Israel.

¿Cuál es el significado del Salmo 53?
El Salmo 53, también conocido como Salmo 52 en algunas versiones de la Biblia, es un salmo de lamentación y súplica. En este salmo, el salmista expresa su angustia y busca la protección y salvación de Dios.
A continuación, te presento un breve resumen del significado del Salmo 53:
El Salmo 53 comienza con una descripción de los necios y malvados que niegan la existencia de Dios y se entregan a la corrupción y la maldad. El salmista lamenta la falta de sabiduría y rectitud en estas personas y reconoce la necesidad de la intervención divina.
El salmista clama a Dios en busca de ayuda y protección, confiando en su poder y justicia. Expresa su anhelo de que Dios castigue a los malvados y los haga reconocer su error.
El salmista se considera a sí mismo como un siervo de Dios y confía en su gracia y misericordia. Pide a Dios que lo salve de sus enemigos y lo guíe por el camino de la rectitud y la paz.
En resumen, el Salmo 53 es una súplica a Dios para que intervenga en medio de la maldad y la negación de su existencia, buscando su protección y salvación. También nos recuerda la importancia de confiar en la justicia y la misericordia de Dios en medio de las dificultades y adversidades.